Stephen Milden

Me diagnosticaron una enfermedad de hígado graso no alcohólico que impedía que mi cuerpo produjera magnesio, lo que me provocaba calambres musculares debilitantes en manos y piernas, hasta el punto de que no podía usar las manos ni andar. Después de una sesión nocturna, ya no tengo calambres y no necesito ningún suplemento de magnesio.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *